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La niacinamida se ha vuelto un ingrediente esencial en muchos productos cosméticos por sus increíbles beneficios. Ayuda a fortalecer la barrera cutánea, a unificar el tono de la piel y a tratar las manchas. Reduce irritaciones y rojeces equilibrando la piel. Lo mejor de todo es que puedes utilizarla bajo el sol sin problema, ya que no causa manchas al exponerse a la luz solar.
La niacinamida, también conocida como vitamina B3 o nicotinamida, es una forma soluble en agua de la vitamina B3, esencial para mantener la salud de la piel. Está presente en alimentos ricos en vitaminas como la col rizada, los champiñones y las almendras.
Es adecuada para cualquier tipo de piel y tiene numerosos beneficios. No solo disminuye los efectos del daño ambiental al fortalecer la capa externa de tu piel, sino que también promueve la restauración de los daños anteriores.
Es posible observar resultados a partir de 4 a 12 semanas de uso diario, dos veces al día, pero lo mejor es un uso constante para obtener mejores resultados.
Las investigaciones han demostrado que la niacinamida tiene grandes beneficios cuando la aplicas en la piel, especialmente por su capacidad para luchar contra los signos del envejecimiento.
Este activo ayuda a fortalecer la barrera cutánea, lo que hace que tu piel pueda retener mejor la humedad. Además, estimula la producción de colágeno, lo que ayuda a reducir las arrugas y otros signos de envejecimiento.
Si tienes manchas o marcas en la piel, la niacinamida es ideal para reducirlas. Gracias a sus propiedades despigmentantes y antiinflamatorias, te ayudará a mejorar el tono de tu piel
El acné aparece cuando los poros se taponan con sebo, células muertas y otros residuos. Si tienes la piel propensa al acné, la niacinamida te va a ayudar a regenerar las células de la piel, reduciendo la aparición de imperfecciones. Además, sus propiedades antiinflamatorias y reguladoras del sebo ayudan a mantener los poros menos obstruidos.
La niacinamida también fortalece la barrera de la piel, protegiéndola de factores externos. Esto ayuda a mejorar la elasticidad y firmeza de tu piel, manteniéndola más flexible e hidratada. Con el tiempo, favorece su capacidad de regeneración.
Al incluir la niacinamida en tu skincare, es fundamental que tengas en cuenta que este producto es adecuado para uso diario, ya sea por la mañana o por la noche. Puedes encontrar este ingrediente en productos como limpiadores faciales, sérums, cremas y protectores solares.
Aquí tienes los pasos para incluirla en tu rutina de cuidado de la piel:
1) Limpieza: empieza con el rostro limpio y seco. Usa un limpiador suave para eliminar impurezas, restos de maquillaje o suciedad acumulada.
2) Tónico: después de la limpieza, aplica un tónico para equilibrar el pH de la piel y prepararla para recibir mejor los siguientes productos.
3) Sérum: si optas por un sérum, aplícalo justo después del tónico. Pon unas gotas en el rostro, aplícalo directamente en la palma de la mano, calienta la fórmula y aplica con suaves toques en el rostro.
4) Hidratación: una crema hidratante ayudará a sellar la niacinamida. Si decides usarla por la mañana, es importante terminar aplicando un protector solar con niacinamida.
5) Crema de niacinamida: si usas una crema de niacinamida, es recomendable aplicarla justo después de la limpieza facial o de aplicar el sérum. Así, aseguras que los beneficios de la niacinamida lleguen a tu piel de forma óptima.
Por cierto, ¿ya te has preguntado si la niacinamida se puede combinar con otros ingredientes? La buena noticia es que sí, y hacerlo puede hacer que sus beneficios sean aún más efectivos. Sin embargo, es muy importante saber qué ingredientes son adecuados para evitar irritaciones o efectos no deseados.
Niacinamida y vitamina C: la combinación de niacinamida y vitamina C puede generar dudas, pero está científicamente comprobado que es segura y efectiva, siempre y cuando los % de ambas fórmulas sean equilibrados y tengan un pH similar, preferiblemente neutro, ni ácido ni alcalino.
Pueden usarse por separado en la rutina diaria, con vitamina C por la mañana y niacinamida por la noche. Si se aplican juntas, se recomienda aplicar primero la vitamina C, dejar que se absorba completamente y luego la niacinamida.
Niacinamida y retinol: ambos son ingredientes potentes para mejorar la textura de la piel, reducir manchas y líneas de expresión. Si vas a combinarlos, lo ideal es introducirlos poco a poco y empezar con concentraciones bajas. Como el retinol puede causar más sensibilidad, se recomienda aplicar primero la niacinamida y después el retinol. También puedes usarlos en distintos momentos: niacinamida por la mañana y retinol por la noche.
Niacinamida y ácido hialurónico: puedes usarlos de diferentes formas. La combinación de ambos en un solo producto funciona muy bien. Si prefieres usarlos por separado, asegúrate de distribuirlos de manera uniforme en todo tu rostro.
Ácido glicólico y niacinamida: si quieres disfrutar de los beneficios de estos dos ingredientes sin dañar tu piel, empieza de manera gradual y opta por productos con concentraciones bajas. Antes de aplicarlos en el rostro, haz siempre una prueba de parche. Además, después de utilizarlos, no olvides aplicar una buena crema hidratante. Y, por supuesto, siempre protector solar, incluso cuando el día esté nublado.