Cuidado de la Piel

Incorpora retinol a tu rutina skincare de noche, ya que es sensible a la exposición a los rayos UV. Para comprobar su idoneidad con tu piel, comienza con una o dos aplicaciones semanales y ve aumentando gradualmente. También puedes probar la técnica del 'sándwich de retinol', que consiste en aplicar una fina capa de crema hidratante, luego una fina capa de tratamiento con retinol y, finalmente, otra capa de crema hidratante. Aplica siempre SPF durante el uso en la rutina de día. Evita el área de los ojos si el producto no está diseñado específicamente para uso debajo de los ojos.

Utilizar protector solar es uno de los mejores (y más fáciles) métodos para proteger la apariencia y la salud general de la piel, independientemente de la edad. La aplicación regular de protector solar ayuda a prevenir las quemaduras solares y el envejecimiento prematuro de la piel.

Sí, es mejor aplicar el sérum de vitamina C por la mañana para preparar la piel para la exposición a factores ambientales estresantes. El retinol es más eficaz cuando se utiliza por la noche para facilitar la restauración de la piel durante la noche. Cuando se usan juntos, estos ingredientes trabajan para mantener la apariencia suave, brillante y juvenil de la piel.

Guarda el producto de vitamina C en un lugar fresco y oscuro para mantener su eficacia. Aplícalo una vez al día por la mañana después de la limpieza y recuerda seguirlo con SPF (protección solar).

Evita combinar AHA y BAHA con productos con retinol, ya que esto puede provocar irritación. Además, evita mezclar estos ingredientes con productos con vitamina C, ya que también puede causar irritación de la piel.

El cuidado de la piel es esencial por varias razones. Primero, protege contra los daños ambientales, como la exposición al sol y la contaminación, reduciendo el riesgo de cáncer de piel y envejecimiento prematuro. Segundo, una piel sana mantiene la barrera protectora del cuerpo, previniendo infecciones. Además, una rutina de cuidado adecuada puede mejorar la apariencia y la textura de la piel, aumentando tu bienestar general.

Además de todos estos consejos, es conveniente crear unos hábitos saludables que nos permitan cuidar nuestra piel en el día a día. Entre los más importantes se encuentran los siguientes:

● Protégete del sol y evita una exposición duradera

● Lleva una dieta saludable

● Controla el estrés

● Evita fumar y tomar alcohol

● Trata tu piel con suavidad